¿Qué encontrarás en esta guía?
- Antes de nada, ¿cómo funciona un electroestimulador?
- ¿Qué aspectos tener en cuenta para elegir un electroestimulador?
- Tesmed vs Compex: Los modelos más destacados
- EMS vs TENS: ¿Cuándo te recomiendo cada tipo de programa en un electroestimulador?
- Tesmed vs Compex: ¿Qué marca de electroestimuladores me convence más?
¿Cuántas veces te ha pasado estar sentado/a en el sofá y pensar: ojalá pudiera estar haciendo ejercicio sin moverme de aquí? Yo, al menos, unas cuantas, y se ve que no soy la única, porque el auge de los electroestimuladores musculares sigue imparable. Estos dispositivos están diseñados para mejorar el tono muscular y fortalecer los músculos, y he querido probar los modelos más interesantes de dos de las marcas más vendidas: Tesmed vs Compex.
Lo primero que quiero decirte, antes de entrar en detalles, es que el uso de electroestimuladores no sustituye a la práctica deportiva, en absoluto. Sin embargo, puede ser una buena alternativa para personas que han sufrido una lesión y necesitan mantener algo de ejercicio y tono muscular, o para quienes en un momento dado tienen una movilidad más reducida. Yo he sacado mis propias conclusiones, y ahora quiero compartirlas contigo. ¡Vamos allá!
Antes de nada, ¿cómo funciona un electroestimulador?
Vale, es probable que esta sea la primera pregunta que te hagas (al menos, es la que yo me hice). Grosso modo, los electroestimuladores musculares son aparatos que transmiten pequeños impulsos eléctricos a los músculos, similares a los que transmite nuestro sistema nervioso, para generar en ellos una mayor resistencia y capacidad de respuesta mediante la contracción automática de los mismos. Todo ello, controlado, claro, para regenerar las fibras que estén dañadas.
Voy a ser sincera contigo: yo no creía en la eficacia de estos aparatos, para qué engañarnos. Hasta que tuve una lesión que me impidió practicar deporte durante varios meses, y noté cómo mis músculos se volvieron flácidos y frágiles. Decidí probar un electroestimulador y los resultados, aunque no son inmediatos, se notaron en unas semanas.
¿Qué aspectos tener en cuenta para elegir un electroestimulador?
Otra duda que seguramente te asaltará es qué características debe tener un electroestimulador muscular para elegir uno u otro. Te voy a decir los que considero más importantes o con más influencia en la decisión, aunque esto siempre depende de las condiciones físicas y de las limitaciones que tenga cada persona.
Programas y modos de estimulación
Asegúrate de que el electroestimulador tenga una variedad de programas y modos de estimulación que se adapten a tus necesidades y objetivos. Algunos electroestimuladores tienen programas predefinidos para diferentes grupos musculares o tipos de entrenamiento. Normalmente, los puedes encontrar bajo denominaciones como EMS o TENS, según si son de entrenamiento muscular o de alivio de tensión muscular.
Por ejemplo, si necesitas tonificar los músculos abdominales, comprueba que el modelo que escojas tenga un programa específico para ello, aunque hoy en día, la mayoría suelen incorporar casi todos.
Canales
Esto es importante. Normalmente, suele haber electroestimuladores de 2 o 4 canales; es decir, en los que puedes utilizar 2 o 4 cables a la vez. Cuantos más electrodos tenga, mayor será la cobertura y la precisión en la estimulación de los músculos.
Duración de la batería
Revisa la duración de la batería del dispositivo. Esto es especialmente importante si planeas usarlo durante sesiones de entrenamiento largas. Por largas, me refiero a más de media hora, piensa que no es recomendable utilizar este tipo de aparatos durante mucho tiempo.
Niveles de intensidad
Además de consultar los programas predefinidos, es fundamental comprobar cuántas intensidades tiene cada electroestimulador. En la práctica, lo habitual es que siempre utilices más o menos las mismas, pero siempre está bien tener más opciones. Y, en caso de empate, puede ser un elemento de decisión importante.
Tesmed vs Compex: Los modelos más destacados
Ahora, voy a contarte cuáles son las características principales de los modelos que más me gustan de cada marca.
Tesmed Trio 6.5 – Estupenda relación calidad-precio si buscas uno básico
Ya te aviso que este es el electroestimulador más barato de todos, y, bajo mi opinión, tiene una relación calidad-precio muy buena para quienes busquen un modelo más sencillo pero efectivo. Cuenta con 36 programas predefinidos, de los cuales, 12 son para entrenamiento muscular general, 12 para aliviar dolencias, y otros 12, para masajes (de ahí el nombre de “Trío”, hasta que me di cuenta…).
Además, tiene 40 niveles de intensidad. Tiene batería recargable, y tarda unas dos horas en cargarse. La autonomía depende del uso que le des, pero a mí me suele durar unos 10 días si utilizo el electroestimulador un ratito de unos 15-20 minutos todos los días.
También me gusta mucho el hecho de que incluye ya 4 electrodos que ya tienen gel, así que no es necesario aplicar más y, por tanto, eso que ahorramos.
Tesmed Max 830 – Casi 100 programas
Este modelo de Tesmed, de 4 canales, es un nivel más avanzado que el anterior, aunque no es de los más caros del mercado. En este caso, encontramos hasta 99 programas, lo que ya es una diferencia significativa frente al otro. De ellos, 20 se pueden personalizar ajustando la potencia y la intensidad. Los otros 79, tienen preajustes multifase con varios niveles de estimulación, así que es realmente difícil no encontrar uno que se ajuste bien a lo que necesitas.
En cuanto a la batería, en este nos dura un poquito menos que en el modelo anterior, aunque es cierto que lo utilizamos durante algo más de tiempo. Nos suele durar unos 7-8 días, aproximadamente.
Lo que más me gusta de este modelo es el sistema Waist, de estimulación secuencial de abajo hacia arriba. Otra diferencia es que, mientras el otro Tesmed incluía 4 electrodos en su equipamiento de serie, aquí tenemos 20.
Compex Fit 1.0 – Pocos programas para el precio que tiene
El primero de los electroestimuladores de Compex que analizamos es el primero de su serie Fi. Con este modelo, admitimos que nos sucede algo curioso. Viendo el precio, podríamos pensar que estamos ante un modelo similar al Tesmed Max 830. Sin embargo, tan solo cuenta con 10 programas, de los que 8 son EMS, 1 es TENS y 1 es de masaje. Realmente, y si soy totalmente sincera, se me queda corto. Sobre todo, teniendo en cuenta que hay otros modelos que, por un precio similar, tienen diez veces más programas.
Tiene 4 canales independientes, y eso está muy bien, pero no es una característica diferencial con respecto a otros. Lo que sí me gusta es que se puede sincronizar con la app Compex Coach, desde la que puedes seguir cómo vas progresando.
Compex Fit 3.0 – Súper versátil en los músculos
Veamos, ahora, el Compex Fit 3.0, en el que sí vemos mejoras sustanciales con respecto al 1.0. Para empezar, tiene 20 programas, una cifra que ya nos da una variedad más amplia. De ellos, 8 son anti dolor, 9 son fitness, 2 son de recuperación y 1 de rehabilitación. Lo más característico con respecto al 1.0 es que el Compex Fit 3.0 tiene tecnología Mi-Scan, que ajusta automáticamente, a través de un escaneo de la musculatura, los parámetros del electroestimulador a tu fisiología.
Básicamente, nos permite adaptar la intensidad y la potencia al estado actual de cada músculo, que no tiene por qué ser el mismo a lo largo de todo el día. Yo, particularmente, lo uso sobre todo cuando vengo de correr, que es el momento en el que los músculos están más tensos, y se nota mucho. Esta es la típica función que, si no la conoces, no la utilizas, y he de decir que le he sacado un gran partido. Pensándolo bien, quizá por eso se me queda tan corto el electroestimulador anterior.
Compex Fit 5.0 – El más completo de la gama
El tercer modelo de esta gama es el más avanzado, pero su precio ya es más alto, y eso nos hace preguntarnos si realmente merecerá la pena. Al igual que el resto, tiene 4 canales. En este caso, encontramos 30 programas: 10 anti dolor, 4 de recuperación, 2 de rehabilitación y 14 de fitness. Como ves, tiene más que los otros dos integrantes de la gama Fit de Compex, pero está lejos de los casi 100 que tiene Tesmed.
En cambio, sí encontramos una innovación más que el Fit 3.0: combina la tecnología Mi-Scan con Mi-Range. Esta última indica la intensidad óptima de estimulación para los programas de recuperación. Por lo demás, no hay más diferencias con respecto al Fit 3.0, y, particularmente, dudo de que esta justifique una diferencia económica tan amplia.
Tesmed vs Compex: Ventajas y desventajas
Aunque seguramente ya habrás adivinado cuál es mi decisión, voy a resumir, en estas tablas, los pros y los contras de cada uno:
Ventajas destacadas
Inconvenientes principales
EMS vs TENS: ¿Cuándo te recomiendo cada tipo de programa en un electroestimulador?
A estas alturas, seguramente ya te habrás dado cuenta de que los programas que tienen estos dispositivos se suelen dividir en varios grupos. Voy a contarte cuándo es más recomendable utilizar cada uno:
- EMS: es lo que conocemos como los programas de electroestimulación muscular. Son los que se suelen utilizar cuando hacemos deporte y tenemos una sobrecarga, o cuando queremos fortalecer un músculo. Dentro de esta clasificación, hay algunos programas con una orientación más deportiva y otros que son más fitness, como puede ser el fortalecimiento de los glúteos, por ejemplo.
- TENS: los programas TENS se utilizan para la recuperación de lesiones más importantes, porque su principal foco es disminuir la sensación de dolor.
- Masajes: suelen ser los menos variados, porque básicamente se dedican a masajear la zona, pero sin una intención tan curativa como los anteriores.
Tesmed vs Compex: ¿Qué marca de electroestimuladores me convence más?
En este caso, lo tengo bastante claro. El Tesmed Max 830 es el que tiene la mejor relación calidad-precio de todos. En general, Compex me parece bastante caro para lo que ofrece, sabiendo que hay otros competidores que tienen modelos muy similares a un precio más reducido. Es cierto que es una marca muy reputada, pero no es la única que existe. En todo caso, el Compex Fit 3.0 tiene una relación calidad-precio que se ajusta mejor, pero, aún así, no iguala a la del modelo de Tesmed.
Lo más importante en un electroestimulador es que disponga de suficientes programas como para satisfacer tus necesidades, que la intensidad se pueda regular y que sea fácil de utilizar. Y, bajo mi punto de vista, el que mejor cumple con estas cualidades es el de Tesmed.
¿Significa esto que no recomiendo Compex? No, para nada, simplemente, que entre estas dos marcas, Tesmed consigue un equilibrio más interesante entre la calidad y el precio. Por ejemplo, si buscas un modelo más profesional, nunca te recomendaría el Tesmed Trio 6.5, cuyo uso es más bien amateur o para molestias muy leves. Pero, entre los modelos que hemos tomado como referencia, el Tesmed Max 830 gana por goleada si tenemos en cuenta la calidad que obtenemos por el precio que pagamos.